Iniciada la década de 1890 se creó, por parte de la comunidad británica asentada en Huelva, una peculiar institución que tenía como fin el ofrecer diversas actividades de recreo y entretenimiento a los marineros de cualquier nacionalidad que desembarcaran en la ciudad onubense y que deseasen ocupar su tiempo de ocio efectuando, principalmente, actividades deportivas.
Dicha institución se denominó The Seamen's Institute y, según sus actas fundacionales, fue creada en origen por socios ingleses. De tal modo, este instituto fue consolidándose como uno de los principales puntos de encuentro en Huelva entre los británicos que allí residían, ya fuesen miembros de la compañía The Rio Tinto Company Limited o los numerosos marinos que llegaban al puerto onubense en buques destinados a la carga del mineral u otros cargamentos para su exportación.
Sin embargo, esta institución británica recién asentada en Huelva (localizada entre las calles Duque de la Victoria, Valencia y Odiel) ofreció asimismo otros servicios a sus socios que no fueran meramente deportivos, pues disponía igualmente de una escuela, habitaciones, una capilla protestante, una biblioteca, una sala de billar y otra de lectura; todo ello a fin de dar cobijo y consideración a un gran número de foráneos que acudían temporalmente a la ciudad, evitando así un posible deambular continuo por la misma de un gran número de personas, como era común que sucediera en las ciudades portuarias de la época.
Los años siguientes continuarían con la práctica organizada de partidos de foot-ball y criquet entre los socios del Huelva Recreation Club y los miembros del The Seamen´s Institute, aunque ya entrado el siglo XX, la gran popularidad y calado de ambas instituciones en la sociedad onubense, adquirida por la propia práctica del fútbol en la ciudad, motivó que en el año 1903 se formalizara, a propuesta del directivo del Recreation Club, José Muñoz Pérez, la creación de un torneo de fútbol que enfrentase de manera exclusiva a los socios del Club Recreativo de Huelva con los marineros asociados al The Seamen´s Institute.
De tal forma, el primer partido de la Copa Seamen´s de Huelva, aconteció el día 2 de enero del año 1904 y, desde entonces, dicho torneo continuaría celebrándose los años siguientes en la capital onubense. Así pues, vamos a centrarnos a continuación en la disputa de la Copa Seamen´s del año 1906, cuya crónica del partido fue plasmada tanto en la prensa española como británica de la época.
El periódico La Provincia hizo una escueta narración del encuentro de este modo: «El partido jugado anteayer tarde entre los socios del Club Recreativo y los de Seamen´s Institute, resultó muy animado, acudiendo a presenciarlo bastante público. Ambos team jugaron con gran entusiasmo, resultando vencedores los mencionados en segundo lugar, que quedaron en posesión de la copa de plata».
Sin embargo, la prensa británica sí fue más extensa a la hora de contar lo acontecido en el partido de fútbol entre ambas instituciones que luchaban en Huelva por obtener el título de la Copa Seamen´s y que fue descrito así:
«El lunes 2 de abril un equipo seleccionado entre los barcos ingleses que recalaban en Huelva derrotó al equipo onubense de fútbol por un gol a cero. El partido se disputó por la Challenge Cup y fue trabajado con gran éxito por el equipo británico.
Los españoles reunieron a su equipo más fuerte y, con un doble objetivo a la vista, desafiaron a los marineros. En primer lugar, querían ganar la copa que entregaba un caballero español local y que actualmente ostentan los marineros ingleses, aunque también querían prepararse para su próximo partido de liga nacional en Madrid.
Ningún partido más reñido y duro se ha visto nacer en el campo de fútbol de Huelva. Desde el comienzo del encuentro hasta que sonó el silbato para el final, fue una dura competencia por la supremacía del juego.
El equipo de los buques, aunque afectado por la falta de entrenamiento y equipamientos de fútbol adecuados, luchó con la mayor tenacidad. Con los trajes de fútbol improvisados, los marineros presentaban un contraste extraño, si no divertido, con la selección española elegantemente vestida, pero demostraron con creces que eran oponentes a tener en cuenta, y que lo que les faltaba en apariencia y entrenamiento lo compensaban de forma permanente en su determinación de ganar.
En ningún instante la contienda fue lenta, y en todo momento estuvo marcada por las buenas sensaciones y el juego limpio. El equipo del barco estaba capitaneado por el Sr. Howald, de Whitley, segundo oficial del SS Ashfield. Destacó el brillante juego en la parte trasera derecha del campo del Sr. Hood, oficial en jefe del vapor Sunderland y también de J.Y. Short. El Sr. Robson, de South Shields, tercer ingeniero del vapor SS Mayer de Newclastle, también realizó un juego muy fuerte en la mitad central. El Sr. Young, de North Shields y un pasajero del vapor SS James Westoll de Sunderland, jugaron de adentro hacia adelante por la derecha y de adentro hacia la izquierda respectivamente.
El partido se disputó en el Campo de Fútbol de Rio Tinto, y como hay unas cuarenta embarcaciones esperando para cargar, había un gran número de capitanes de barco y oficiales presentes. La rivalidad era muy viva, debido a que los españoles confiaban más en la capacidad de su selección nacional para llevarse la copa. El juego se desarrolló mayoritariamente en territorio español, y sus laterales estuvieron muy ocupados.
Si no hubiera sido por su hábil defensa, el puntaje hubiera sido mayor. Sus delanteros fueron notablemente rápidos y en espléndidas condiciones, y ejecutaron algunos pases inteligentes. En su conjunto, el equipo español parecía carecer de la obstinada determinación del equipo del barco.
Después del partido, hubo un concierto de lo más ameno en el Seamen´s Institute. La copa, que es grande, bellamente realzada, estaba a la vista y fue muy admirada por la entusiasta audiencia. El instituto estaba abarrotado y el programa improvisado tuvo una recepción muy calurosa. Los preparativos para el juego y el concierto se hicieron bajo los auspicios del Seamen´s Institute, y fueron hábilmente realizados por el Sr. Richardson, de la sede de Huelva».
Bibliografía:
-Diario La Provincia.
-Diario The Shield Daily News.
-www.recreativodehuelva.com